ESTRUCTURA Y ORGANIZACIÓN
Lo más importante en la organización de un equipo SWAT es decidir la composición. Las consideraciones primarias en la organización de cualquier equipo debe ser el control y la seguridad. El
equipo debe ser lo suficientemente grande como para dar seguridad completa durante el movimiento al establecer contacto con un
sospechoso, pero también debe ser de un tamaño que pueda facilitar el control al líder. Es importante tener siempre en cuenta que un equipo SWAT es un equipo controlado.
El líder, quien tiene la responsabilidad última de sus acciones, debe ser capaz de controlar las acciones de cada miembro. La clave para el control es la comunicación, por lo que el tamaño es importante. La comunicación por radio aumentará la distancia a la que el equipo puede ser controlado pero en la mayoría de situaciones el silencio es una necesidad táctica. Las comunicaciones serán discutidas en detalle más adelante.
Se recomienda una unidad de 5 hombres para cualquier equipo SWAT. Este
tipo de estructura organizativa da el máximo control y seguridad al líder y puede desplazarse a mayores distancias para mejorar la efectividad del
equipo. Puede haber más de una unidad de 5 hombres dentro de un equipo SWAT, dependiendo del tamaño seleccionado por el departamento de policía.